En Quisiro, pequeña población del Estado Zulla, nació el Dr.
Manuel Matos Romero, el 25 de junio de 1906. Reconocido nacional e
internacionalmente como un brillante profesional del derecho, descolló
igualmente como periodista, historiador, educador, dirigente político, diplomático
y hombre público en general.
El movimiento espiritista de Venezuela y de América tuvo en él una de sus
figuras más representativas, tanto por su activa participación como organizador
de sociedades y federaciones como por su muy valiosa contribución
intelectual.
De su amplísimo curriculum, reseñamos apenas algunas informaciones
relevantes:
Doctor en Jurisprudencia de la Real Universidad de Pisa, Italia. (1930).
Doctor en Ciencias Políticas y Sociales de la U.C.V., Caracas. (1931).
Magistrado de la Corte Suprema de Justicia del Estado Zulia (1935), diputado
a la Asamblea Legislativa del Estado Zulia (1936). diputado por el Estado
Zulia al Congreso Nacional (1937-1940). Presidente del Concejo Municipal del
Distrito Maracaibo (1950). Presidente de la Asociación de Folkloristas del
Estado Zulia (1976-1982). Presidente de la Academia de Historia del Estado
Zulia (1977-1979). Miembro de numerosas sociedades jurídicas de Venezuela y
del mundo. Profesor universitario en diversas instituciones del país.
Cincuenta y dos obras y más de doscientos artículos de prensa, legó
a la posteridad el ilustre zuliano, incursionando con lujo de aciertos en
temas tan diversos como el espiritismo, la parapsicología, el derecho, la
música, la política o la historia. En su producción concretamente espírita, destacan
entre otros los siguientes títulos: "Criminología y
Espiritismo"; "Psiquiatría y Psicología en relación con las
Ciencias Psíquicas y Metapsíquicas"; "Bolívar, médium y
clarividente"; "Historia del Espiritismo en Venezuela";
"La reencarnación en el pensamiento universal"; "Dante
Alíghieri, maestro misionero"; "La convergencia del
materialismo científico del derecho penal con la filosofía criminológica del Espiritismo."
Desde la más tierna infancia se cimentaron sus conocimientos y convicciones
espíritas, pues descendía, por vía materna y paterna, de los propios
iniciadores del movimiento espírita venezolano. Fue su abuelo el
General Delfín Romero, fundador de la Sociedad Espírita de Quisiro en 1882,
primer centro espírita que se creó en el país. Posteriormente, sus
familiares se contaron entre los organizadores de la Sociedad
Espírita de Maracaibo, institución pionera en el occidente
venezolano, en la cual actuaron hombres de alta relevancia en la vida social,
cultural y política zuliana y venezolana, como: Valmore Rodríguez, Isidro
Valles, Alfredo Paría, Pedro Rene Barboza, Alberto Hernández, César Leal,
entre otros.
Fue un hombre de mentalidad abierta, que hacía del librepensamiento su
principal definición, mostrándose favorable al examen de todas las ideas y
contrario a los dogmatismos de cualquier índole.
En política militó en los movimientos progresistas de su tiempo, y en la
visión filosófica y ética que dirigió su vida, además del Espiritismo,
influyó también la Masonería, movimiento filosófico y fraternalista que ha brindado al mundo una decisiva
contribución a favor de los más caros ideales de justicia, igualdad y
libertad, y en el cual tuvo una destacada actuación. Quienes lo conocimos y
disfrutamos de su amistad y de su cultura, siempre admiramos la unidad
armónica de sus principios doctrinarios y la más absoluta consecuencia de su
vida, tanto privada como pública, con esos principios. Desencarnó el
22 de agosto de 1989 en Maracaibo.
El nombre de Manuel Matos Romero brilla con luz propia, haciendo parte de esa
galería de ilustres figuras del Espiritismo zuliano como Jesús Enrique
Lossada, Rosa Virginia Martínez, Renato Gutiérrez, Pedro Barboza de la
Torre, Gastón Chocrón, a quienes tanto debe la cultura
espírita nacional.